Vilma Álvarez, militante del Comité por una Internacional de Trabajadores en Chile y dirigente social de La Granja, zona popular en Santiago, ha encabezado durante cuatro años la lucha de numerosos vecinos de La Granja y La Pintana, gravemente afectados por la construcción de una autopista. Sin contar el deterioro que afectará el entorno y la calidad de vida cuando miles de vehículos circulen por la carretera, la construcción se comenzó sin considerar cosas básicas, sin consultar para nada a los vecinos afectados, el gigantesco agujero en algunos puntos quedó junto a la entrada de las casas.
Esta autopista forma parte del diseño de vías concesionadas a empresas privadas que cobran peaje a los automovilistas que se desplazan por ellas, una solución a los graves problemas de congestión de la capital chilena que ha sido fuertemente criticada por los urbanistas que sostienen que impulsará el aumento del parque de automóviles, y que a la vuelta de pocos años la ciudad estará tan congestionada como antes de la construcción de la red de autopistas urbanas.
Durante cuatro años grupos de vecinos afectados por la carretera se han movilizado para conseguir la expropiación de la primera línea de viviendas, con indemnizaciones adecuadas, y han conseguido impedir hasta ahora que se termine la construcción de la autopista. Entre las últimas acciones los vecinos se tomaron la obra de construcción del túnel en las calles San José de la Estrella con Serena y consiguieron que sus reivindicaciones salieran en directo por televisión.
La compañera Vilma Álvarez ahora ha denunciado que está siendo amenazada por fuerzas policiales y el gobierno central que la amenaza con encarcelarla. Incluso un furgón policial fue a su domicilio cuando ella no se encontraba para preguntar a su hija sobre quien más estaba involucrado en las actividades de la toma. En julio del año pasado la dirigente social fue detenida junto a otras cinco vecinas, fueron desnudadas en la 30° comisaría, trasladas en un carro celular junto a delincuentes comunes a los tribunales. Debieron permanecer en distintas celdas con reos comunes, y finalmente sentenciadas a un año de no acercarse a las obras.
Vilma relató que "El miércoles 13 de la semana pasada vino a la toma, el prefecto sur cordillera Teniente Coronel Omar Gutiérrez y el Mayor Ortiz de la Comuna de La Granja a poner las cosas bien claritas. Nos señalaron en forma muy "respetuosa" que desistiéramos por la buenas, dado que ellos tenían en la Tenencia Rivera a fuerzas especiales y al fiscal para llevarnos detenidas por impedir la construcción del túnel acceso sur a Santiago."
En un intento directo de amedrentamiento el Mayor Ortiz señaló " …Usted señora Vilma ya tiene antecedentes por lo tanto esta vez tendrá mayores problemas que la vez anterior…"
Por ahora los vecinos movilizados han decidido dejar la toma de la obra del túnel, pero siguen realizando otras actividades para impedir que se construya la autopista en las actuales condiciones.
Rogamos escribir cartas de repudio a las maniobras para acallar a la compañera Vilma Álvarez al Ministerio de Obras Públicas (MOP) gavinete.ministro@mop.gov.cl con copias a srcitchile@gmail.com
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